Tal y como recordaba Fernando Aguileta de la Garza, la casa francesa ha establecido un patrón de dominancia masculina que daba carpetazo a los tiempos en los que en París sí podían diseñar mujeres para mujeres, la denominada ‘era dorada’ de las couturières. «Durante el periodo de entreguerras, además de Chanel, las líderes eran Madame Grès, las hermanas Callot, Sonia Delaunay, Nicole Groult (la hermana pequeña de Paul Poiret), Jeanne Lanvin, Nina Ricci, Elsa Schiaparelli y la incomparable Madeleine Vionnet. No es que no existieran hombres dedicados al diseño, pero ‘la emoción residía en el reinado de las mujeres’, en palabras de Cecil Beaton en su libro El espejo de la moda. Pero a partir de los años cincuenta los hombres volvieron a tomar el control». De confirmarse el aterrizaje de Maria Grazia Chiuri, se cerraría una estapa de siete décadas.