Del URL al IRL.

IRL Style Guide
El canon digital encuentra su contrapunto perfecto en el mundo real, lo intangible toma forma borrando las fronteras del mundo en línea. El cliente busca la experiencia máxima, pero, ¿estamos listos para integrarlo todo?.
MediaA The Style Guide

“Divide y vencerás”, reza la antigua estrategia romana para reinar. Si Julio César hubiera tenido acceso a Internet, seguramente habría cambiado inmediatamente de opinión, o al menos en parte para lidiar con los azares de la vida moderna, entre arrobas, Apps, GPS, cuentas de correo, e-commerce y pagos electrónicos.

En contexto (y para clarificar cosas), IRL es el acrónimo en inglés de la frase “in real life”, es decir, nuestro mundo de toda la vida. URL es el acrónimo utilizado popularmente online para asignar recursos disponibles en línea para ser localizados y encontrados, es decir, direcciones electrónicas o páginas web.

Marcas, proyectos, contenidos, servicios y relaciones han tenido que adaptarse a la sinergia con el objetivo de potenciar lo mejor de cada canal para lograr mirar el todo y no únicamente las partes, creando satisfacción para los clientes con cualquier formato, en cualquier momento y sobre cualquier necesidad.

Desde el marketing se habla de Omnicanalidad, en Branding hablamos de experiencia y para las personas, una oda al sentido común. Hoy el cliente tiene acceso en directo a la marca y todo intangible se puede convertir en tangible con el objetivo de ser memorables. En esta tónica, lo digital y lo analógico más que estar en planetas distintos se encuentran en un nuevo código-lenguaje altamente beneficioso, por un lado desde lo digital la inmediatez y por otro desde lo físico la permanencia.